jueves, 12 de mayo de 2011

6 Pasos para la magia perfecta




Hay pasos generalmente reconocidos que se enseña a utilizar a los brujos para crear hechizos que tengan éxito. En el fondo, los pasos siguen siendo básicamente los mismos de brujo a brujo, de tradición a tradición, y del pasado al presente. Este vínculo mágico con nuestro antiguo pasado es una de las pocas cosas de las que puede asegurarse razonablemente que se han mantenido constantes en nuestra religión siempre cambiante.
La magia natural requiere seis componentes básicos para tener éxito. Esto a veces es visto como un proceso en cuatro etapas que utiliza como fundamentos "desear, atreverse, saber y guardar silencio". Yo prefiero ampliar esta fórmula a las seis partes siguientes:

Deseo y necesidad
El deseo y la necesidad impulsan al brujo a construir un hechizo plausible. Esto crea vínculos con el resultado deseado, tanto en el plano físico como en el ultraterrenal. Es en este plano ultraterreno, o astral, donde los hechizos deben cobrar forma en primer lugar antes de que puedan descender hacia la manifestación física.
 

Creencia
Los brujos con éxito deben creer en el resultado de sus hechizos y tener confianza en su capacidad para hacer que cobren vida. La magia implica un cambio de la conciencia; es una operación que se lleva a cabo en gran medida en la mente. Esto no hace que el resultado sea menos real, pero pone un montón de obstáculos en nuestro camino, todos ellos generados por nosotros mismos. Puesto que estamos ocupándonos de una operación mental, toda duda persistente que flote en esa misma mente sólo obstaculizará nuestro trabajo.
La popular frase wiccana para poner fin a hechizos y rituales, "así sea", es otra afirmación de creencia en nuestros esfuerzos. Esta frase ha sido utilizada durante muchos siglos al final de los hechizos para afirmar su realidad en el aquí y ahora. Esta coletilla también tiene otras encarnaciones, pero la variación importa menos que la intención que hay detrás de ella: que su magia debe suceder y debe ser un hecho de ahora, porque usted así lo desea. La confianza de uno mismo se desarrolla con la práctica.
¿Le parece difícil? No lo será cuando verdaderamente necesite y desee aquello por lo que trabaja. Una vez identificado esto, sus formas de pensamiento son lo bastante poderosas para inscribirse en lo astral, haciendo que le resulte más fácil confiar en ellas. Para decidirlo en términos muy simples, se vuelven tan "reales" que llegan a ser demasiado densas para el mundo astral, por lo que no tienen otra opción que la de manifestarse en lo físico.

Implicación emocional 

La implicación emocional alimenta el deseo y la necesidad, estrechando esos vínculos físico/astral. También crea una inversión personal en el resultado lo bastante intensa como para permitirle ver el hechizo hasta el final. Piénselo. Es muy difícil desprenderse de todo aquello con lo que se tiene un vínculo emocional. Todos los días numerosas personas buscan la ayuda de profesionales de la salud mental para liberarse de situaciones a las que han llegado a estar vinculadas emocionalmente.

Conocimiento y expectativas realistas 

Un brujo debe tener el conocimiento mágico suficiente para ser capaz de construir un hechizo apropiado. Esto incluye elegir las palabras de poder apropiadas, tener la capacidad de visualizar correctamente, y poseer el conocimiento para escoger las herramientas y los catalizadores que sean más compatibles con las energías del hechizo. Por ejemplo, la elección de una hierba que tiene la propiedad de atraer amor no sería útil en un hechizo de expulsión.
La habilidad de escoger el momento mágico oportuno también es importante. Si la sincronización astrológica no va a surtir efecto, un brujo tiene que saber cómo adaptar el hechizo en consonancia para aprovechar las condiciones astrológicas existentes.
Conocimiento significa sabiduría. Esto quiere decir que cada uno debe saber cuándo se necesita realmente la magia y cuándo es mejor abordar un problema de acuerdo con los medios convencionales. Si se une al Club del Hechizo-del-Día y se viste con el equipo ritual ante cada problemita que se le presente sólo conseguirá la dispersión de sus energías y se encontrará con que nunca puede centrarse en un problema el tiempo suficiente para resolverlo. La magia constituye un excelente apoyo de refuerzo para nuestros problemas, pero no es una panacea para todos nuestros infortunios. La brujería y Sybil Leek piensan que esta tendencia a irrumpir en la magia sin reflexión previa impone la necesidad de que un brujo debe "limpiar la casa" primero, es decir que tiene que poner en orden otros aspectos de la vida antes de abordar algo tan exigente como la magia. Funciona mejor con la mente despejada, con un centro definido y cuando la vida está al menos bajo cierta apariencia de control, aunque no sea perfecta.
Conocimiento también quiere decir saber cuándo solicitar ayuda externa. En el caso de una enfermedad grave quizá necesite la ayuda de un método cualificado, preferiblemente alguien que se muestre favorable a la inclusión de las técnicas curativas naturales en el tratamiento. Recuerde que la magia no es un "curalotodo". Los hechizos esperan que usemos todos los recursos a nuestra disposición para lograr un resultado con éxito, y a veces esto podría significar combinar nuestros esfuerzos con la sabiduría convencional.
Asimismo, un brujo debe ser lo bastante racional como para saber qué objetivos mágicos son alcanzables en términos realistas y cuáles no lo son. Todo hechizo cuyo objetivo viole las leyes naturales del universo está condenado a fracasar desde el inicio. Ningún hechizo mágico hará que le crezcan alas y pueda volar o que su cuerpo se vuelva invisible. Sin embargo, un hechizo puede permitirle hacer ambas cosas en el estado mágico conocido como proyección astral.


Doncella * Madre * Anciana

CURRENT MOON